Esta imagen bien pudo ser tomada allá por 1600 durante el reinado de Philippvus III. Águilas reales oteaban Zaballa y dejaban su huella para no ser olvidados, peregrinos de dos tipos surcaban esos lares, aquellos que desafían a los vientos y los que atravesaban la sierra por el llamado camino de Santiago y que nos dejaban 8 maravedíes, para no ser olvidados. Pequeños tesoros que hay que escarbar para encontrarlos y darnos cuenta de que aquello que no se ve, tal vez existe. Pudiera parecer excesivo que por unas aves se debiera paralizar una actividad humana, pero el concepto del respeto debe primar en nuestros actos, y aunque triste, desearíamos que la irresponsabilidad, hoy en día, no tenga mas argumento que el desconocimiento.

El Consejo de Ministros excluyó del trámite de evaluación de impacto ambiental este proyecto. SEO/BirdLife entiende que debe someterse a dicha evaluación por la posible afección medioambiental del proyecto por la proximidad a la zona de los Montes de Vitoria, catalogados como Espacio Natural, y la vega del río Zadorra, que tiene la consideración de Lugar de Interés Comunitario; a que en el paraje donde se pretende construir está enclavada la zona de presunción arqueológica “Poblado de Zaballa” y a que el lugar donde se pretende la construcción está incluido en el catálogo de Paisajes Singulares y Sobresalientes de la CAPV.